LA MUERTE MISTICA Y LA ELECCION DEL MUNDO VERDADERO

LA MUERTE MISTICA, UNA REVOLUCION COPERNICANA: HOMBRE, MUNDO Y LO SUPERIOR.
En el siglo I de nuestra era el astrónomo Tolomeo escribió una importante obra en la cual establecía el movimiento giratorio de los planetas y de las estrellas en torno a la Tierra, inmóvil.
Esta teoría duró más de 1.300 años, durante los cuales se creyó que nuestro planeta era el centro del universo.
En el siglo XV de nuestra era, esto cambió, cuando Nicolás Copérnico divulgó la teoría de que la Tierra y todos los planetas tenían dos movimientos, uno de rotación y otro de traslación alrededor del Sol.
A partir de esta nueva hipótesis era sencillo explicar el movimiento de los planetas. La Tierra dejaba así de ser el centro del Universo para convertirse en un planeta que giraba alrededor del Sol.
Se le llamó la "Revolución Copernicana", y esta frase se aplicó a grandes cambios de pensamientos y teorías que, teniendo una nueva visión, permiten explicar correctamente determinados fenómenos.
En ese sentido la Muerte Mística es una Revolución copernicana que produce cambios en la visión de hombre, de mundo, y de lo Superior.

LA CARTA XIII DEL TAROT DE MARSELLA
La Carta XIII, del Tarot de Marsella, denominada "La Muerte", nos muestra un esqueleto cortando personas con una guadaña. Hace referencia a la muerte mística, o muerte iniciática. Esta carta nos indica que hay que cortar con lo viejo. Cabezas, manos y pies cortados nos manifiestan que deberemos pensar y actuar de otro modo. Así se produce dicha muerte: debe morir un tipo de vida para comenzar otra; es el inicio de la trasmutación. De este modo ya nada será igual, morirá como Plomo para renacer como Oro. La muerte mística, es una forma de autoaniquilación. Nuestro héroe muere así al mundo profano.

MUERTE MISTICA: EL SEGUNDO PASO DE LA TRANSMUTACION
Sabemos que el héroe para poder pasar del hombre Plomo al hombre Oro deberá sufrir distintas trasformaciones, que lo llevarán a la transmutación total de su ser.
Los pasos imprescindibles que permitirán completar dicha trasmutación son cuatro:
1. El despertar.
2. La muerte mística.
3. El renacer a la otra vida.
4. El proceso de cumplir la Gran Obra.
Hemos visto en el Capítulo dos, cómo el hombre plomo vivía el mundo verde como su hogar. Creía, como la mayoría, que ese mundo material era su mundo. Hasta que un día todo cambia y despierta (paso uno), y luego de un proceso interior "muere" a ese tipo de vida (paso dos). Así deja de ser habitante de dicho mundo y renace en otro mundo, en el celeste (paso tres). Finalmente y luego de cumplir la Gran Obra, completará el proceso de transmutación (paso cuatro).

LA MUERTE MISTICA NO ES EL OBJETIVO DE LA ALQUIMIA, SINO UN PASO IMPRESCINDIBLE
Algunos creerán que la muerte mística es el fin último de la obra. Ellos por creer que ya han completado su transformación, no llegarán nunca a ser Hombres Alquímicos.
Por el contrario, y por lo indicado en el punto anterior, la muerte mística tiene por fin preparar las condiciones para realizar la Gran Obra: el proceso que podrá conducirnos al hombre Oro, al hombre Alquímico. Dicha muerte no es un punto de llegada definitivo, sino uno de partida para otros cambios mayores. Su finalidad es producir una Revolución Copernicana en nuestra Visión de la Realidad.

CAMBIOS DE VISION LUEGO DE LA MUERTE MISTICA
Si el aspirante a alquimista "al despertar" (Capítulo 2) sintió que su centro de gravedad espiritual, pasaba desde el seno de su sociedad a una zona desconocida, ahora conocerá al mundo verdadero.
A partir de la muerte mística nuestro héroe tendrá, como hemos adelantado, cambios en su visión de hombre, de mundo, y de lo Superior.

1. VISION DE HOMBRE: SER ESPIRITUAL CON CUERPO TERRENAL
A partir de la muerte mística, la persona deja de creer que el hombre es un ser terrenal con un espíritu, para darse cuenta que el hombre es un ser espiritual con un cuerpo terrenal.

2. VISION DE MUNDO: EL VERDADERO MUNDO ES EL CELESTE
A partir de la muerte mística, la persona deja de creer que el mundo terrenal, el verde, es el verdadero para darse cuenta de que el verdadero mundo es el celeste. A partir de ahora, como ser espiritual que habita el mundo celeste, "visitará" el mundo terreno para manifestarse. A tal fin cruzará diariamente el umbral que separa ambos mundos.





3. VISION DE LO SUPERIOR: DEPENDENCIA DE LO SUPERIOR
A partir de la muerte mística el hombre deja de creer que él es un centro fijo alrededor del cual gira todo lo demás, sino que comprende que existe algo muy superior a él, de lo cual depende.
Mis planes no son vuestros planes, vuestros caminos no son mis caminos -oráculo del Señor- Como el cielo está por encima de la tierra, mis caminos son más altos que los vuestros, mis planes más que vuestros planes. (Isaías II, 54:8,9)
Pero, ¿Cómo se produce la muerte mística?.

EVENTOS QUE PROVOCAN LA MUERTE MISTICA
Este proceso de muerte mística se puede producir por:
1) Ser transportado al otro mundo.
2) Un ritual de pase de plano.
3) Una experiencia límite.
4) Repetidos cruces del umbral.
Cada uno de estos modos de muerte mística, tiene distintos tiempos de preparación anterior, que veremos seguidamente.

MUERTE MISTICA POR HABER SIDO TRANSPORTADO AL OTRO MUNDO
Cuando una persona ha vivido una experiencia que consiste en pasar al otro mundo de un modo total, indudable, cuando ha podido vivir en plenitud un momento de eternidad del otro mundo, ya no podrá volver a vivir su anterior vida como antes. Ya nada será igual para aquél que lo experimentó, habrá sufrido una muerte mística. Imaginemos la transformación que sufriría alguien que tuviese una experiencia similar a la de Elías cuando es arrebatado al Cielo (2 Reyes 2,11).
Este tipo de muerte mística se produce casi en forma instantánea. La persona no tiene ningún aviso ni preparación previa.

MUERTE MISTICA POR RITUAL DE PASE DE PLANO
En las antiguas tradiciones y culturas se realizaban rituales de tal impacto que transformaban a las personas que los realizaban. Para ellas el ritual implicaba renacer a otro mundo. Es conocido el caso de los Chamanes que tienen que morir a su vida anterior, e iniciarse a través de rituales en su nueva vida.
Uno de los rituales misteriosos más importantes que se conoce en la historia es el de los Misterios Eulosinos.
Se los llamaba en Grecia "Misterios", para indicar una verdad oculta, que podía ser comunicada sólo a los iniciados, a los que se les imponía el silencio, para defender dicho conocimiento de las falsas interpretaciones.
Estos Misterios Eulosinos, se realizaban en la Ciudad de Eleusi, ubicada a 22 Km. de Atenas. Los participantes tenían una preparación previa de tres días. Consistía en meditaciones, rezos, actos de penitencia, y sacrificios luego de los cuales los iniciados estaban listos para recorrer, durante los restantes días, el camino hacia el supremo conocimiento. La duración total de "los Misterios" era de 9 días. Este tiempo les llevaba descubrir "el secreto".
La finalidad de estos Misterios Eulosinos era producir una vivencia de tal intensidad, que provocara una real transformación de la persona. Una experiencia que jamás podrían olvidar. Para ello se los ponía en contacto con las cosas sagradas y se buscaba que tuviesen una comunión con lo divino. Luego de participar en los Misterios Eulisinos el iniciado cambiaba radicalmente su modo de vivir y de pensar.
Para lograrlo se hacía pasar a los candidatos por tres etapas que reproducían el desarrollo de la vegetación: la muerte, representada por la noche, simbolizaba la oscuridad de la semilla en la tierra durante el invierno; el renacimiento representado por la espiga que nace de la semilla aparentemente muerta; y la cosecha del grano, representaba el vivir con un diverso conocimiento el mundo material. Por lo tanto, el iniciado tomando distancia de su forma mortal, podía entrever el principio que siempre renace en la naturaleza y en el Ser Humano.
Este tipo de muerte mística, como hemos visto, suele estar precedida por un trabajo que predispone, prepara y condiciona a la persona para dicha experiencia.

MUERTE MISTICA POR UNA EXPERIENCIA LIMITE
Se produce generalmente en situaciones de accidentes de gravedad, o de muerte con retorno a la vida. Estos casos hacen que la persona tome conciencia del verdadero mundo, que está más allá de los sentidos. Durante estas experiencias las personas, aún las menos creyentes, pueden verse desde afuera de su cuerpo, descubriendo de este modo que ellos no son "ese cuerpo" que yace allá abajo, y al cual las personas que lo rodean tratan de reanimar o lo declaran muerto. Toman conciencia que al partir de este mundo terrenal, luego de la llamada muerte física, dejarán ese cuerpo físico que ven allá abajo, en el planeta tierra, mientras se dirigen a "otra parte". Muchas personas manifiestan haber visto, durante estas experiencias, algo que describen como un túnel azul que se aparece y que ellos intuyen como la vía a seguir hacia el otro mundo. Existe mucho escrito sobre estas experiencias.
Este tipo de muerte mística se produce, como el caso de transporte al otro mundo, casi en forma instantánea. La persona no tiene ningún aviso ni preparación previa. Depende de eventos que él no controla y se le imponen.

MUERTE MISTICA POR REPETIDOS CRUCES DEL UMBRAL
Como hemos visto los tres primeros modos de muerte, provocan la muerte mística de un modo rápido, sujeto a cierta preparación (Caso 2) y, a veces, de un modo casi instantáneo, sin un proceso de preparación para la experiencia (Caso 1 y 3). En cambio en la muerte mística por repetidos cruces del umbral, el aspirante alquímico se prepara lentamente hasta que, como consecuencia de ese trabajo, muere a su vida anterior.
Cuando nuestro candidato a héroe haya avanzado en su preparación, y luego de haber cruzado muchas veces el umbral que separa ambos mundos, es probable que se encuentre sumido en la duda respecto a cuál es el mundo verdadero: el mundo material, mundo verde, o este nuevo mundo espiritual, el celeste.
¿Cómo, nuestro héroe, podrá "descubrir" cuál es el mundo verdadero?.




Será vital para lograrlo la participación de los cocheros. Como sabemos (Capítulo 4) los cocheros, deben crear las condiciones para que el Amo pueda dirigir al Conjunto Carruaje y de ese modo manifestarse en el plano terreno. Los cocheros, por su ubicación en la parte superior del triángulo inferior, son el punto de conexión de los dos triángulos. Permiten o interfieren en la unión de lo superior y lo inferior; juegan el papel de mediadores entre lo incorpóreo y lo palpable.
Surge de lo expuesto que los cocheros son la clave para poner el triángulo inferior, vehículo inferior, al servicio del Triángulo Superior.
Desde este importante lugar deben elegir entre un mundo y el otro, de acuerdo al triángulo por el cual se sientan más atraídos. Deben escoger entre el mundo externo, percibido por los sentidos y transitorio, o aquel interno, espiritual, y eterno. Pueden elegir entre ir hacia lo superior o hacia lo inferior. Si ascienden y se ponen al servicio de lo superior cederán el control al Amo. Si por el contrario se dirigen hacia lo inferior, se creerán como Cocheros los Amos del carruaje, y quedarán atrapado en el nivel del triángulo inferior.
De este modo todo el destino del conjunto carruaje dependerá de la actitud de los Cocheros y de la elección que hagan respecto a cuál es de los dos mundos "el verdadero".
Este cambio de visión de cuál es el mundo verdadero, está hermosamente relatado en la Alegoría de la Caverna de Platón.

ALEGORIA DE LA CAVERNA DE PLATON
En el libro VII de La República, Platón, compara nuestra naturaleza de acuerdo a su evolución. Platón nos invita a imaginarnos a "…unos hombres encerrados en una especie de vivienda subterránea en forma de caverna, cuya entrada, abierta a la luz, se extiende en toda su longitud. Allí, desde su infancia, los hombres están encadenados por el cuello y por las piernas, de suerte que permanecen inmóviles y sólo pueden ver los objetos que tienen delante, pues las cadenas les impiden volver la cabeza. Detrás de ellos, a cierta distancia y a cierta altura, hay un fuego cuyo resplandor los alumbra...". Así Platón nos presenta, en esta alegoría a los prisioneros, encadenados dentro de una cueva, en la cual no podían ver la realidad sino solamente las sombras reflejadas de una realidad que sucedía más allá de lo que ellos podían percibir. Para ellos entonces el verdadero mundo eran estas "sombras". Finalmente uno de esos prisioneros logra liberarse, subir la pendiente, salir de la caverna, ver el día, darse cuenta, luego de un penoso acostumbrase a la enorme intensidad de la luz exterior, de que "ese fuego" era en realidad la luz del Sol. Ahora se da cuenta que esas sombras son falsas, que el verdadero mundo se encuentra aquí afuera: estos son los objetos reales, no aquellos (las sombras que eran su reflejo). Ahora puede contemplarlos directamente.
Este prisionero que asciende a la región superior, afuera de la caverna, es el cochero que logra ver la realidad tal cual es, y que entonces se pone al servicio de lo superior.

LOS CAMINOS POSIBLES
Pero no todos los prisioneros de esta alegoría aceptarán la luz, muchos preferirán seguir creyendo en el mundo de las sombras. Dice Platón, en dicha alegoría refiriéndose a los otros prisioneros: "… si se le obligara a mirar la luz misma del fuego, ¿no herirá ésta sus ojos?. ¿No habrá de desviarlos para volverlos a las sombras, que puede contemplar sin dolor?. ¿No las juzgará más nítidas que los objetos que se le muestran?...".
Del mismo modo a nuestro candidato a héroe se le presentan distintas posibilidades decisorias ante la presencia del Mundo Verdadero, incluyendo el retorno al mundo de las sombras. Puede suceder entonces que:
1. El héroe deje de cruzar el umbral por considerar el mundo celeste como un mundo de ilusión sin sentido.
2. El héroe continúa cruzando el umbral, y siga creyendo que el mundo verdadero es el mundo verde.
3. El héroe continúe cruzando el umbral y dude sobre cuál de los mundos es el verdadero.
4. El héroe continúe cruzando el umbral y se dé cuenta que el mundo verdadero es el celeste.

Analicemos las diversas posibilidades:
1. El héroe deja de cruzar el umbral por considerar el mundo celeste como un mundo de ilusión sin sentido.
En este caso, el candidato a héroe renuncia a cumplir su potencialidad, y se dirige hacia la materialidad del cuerpo, metiéndose de lleno en su conjunto carruaje. Toda su energía disponible se utilizará en el triángulo inferior: distribuida entre sus cocheros, sus caballos y su carruaje.
Habrá comenzado de este modo, el sentido descendente de su energía hacia un Coagula cada vez mayor. Si este proceso hacia lo inferior se intensifica, puede cortarse el canal que le permitía unirse a la luz, dirigiéndose irremediablemente hacia la oscuridad.
Afirma la tradición que cuando el alma está metida profundamente en el cuerpo pueden aparecer los grandes vicios que afectan la conducta, dominándola.

2. El héroe continúa cruzando el umbral, y sigue creyendo que el mundo verdadero es el mundo verde.




Muchas personas se consideran seres terrenos, que buscan acercarse a lo espiritual. A tal fin cruzan repetidas veces el umbral para dirigirse hacia lo superior pero volviendo siempre al único mundo verdadero para ellos "el terrenal", el verde. Pero, si creen que el verdadero mundo es el terrenal, ¿cómo podrán prepararse para ascender a niveles superiores?.
Por ese motivo, algunos volverán a dormirse, dejando de cruzar el umbral, y convirtiéndose así de nuevo en hombres Plomo, otros simplemente se acostumbrarán a esta rutina de entrar en otros mundos para fines menores. Quizás busquen relajarse o energizarse, o simplemente vivir estos mundos con la curiosidad de un niño que juega. Pero será dificultoso para ellos cumplir su misión, la que podría quedar a nivel de potencialidad.

3. El héroe continúa cruzando el umbral y duda sobre cuál de los mundos es el verdadero.
Esta duda que confunde a nuestro héroe ha sido simbolizada en la carta de Tarot de Marsella número 6, llamada "El Enamorado".
En dicha carta se ve a un joven que debe elegir entre dos tipos de vida, pero que aún no sabe cuál es la indicada. Esto lo sumerge en la duda.
Del mismo modo nuestro héroe, está atrapado en la duda, hasta que se convenza de que el mundo verdadero es el inferior o el superior. Mientras se mantenga en la duda, ésta lo inmovilizará y lo hará consumir enormes cantidades de energía sin ningún provecho.
Si finalmente logra liberarse de la duda, se dirigirá hacia lo inferior o hacia lo superior. Ya hemos visto, en el punto 3, qué sucede cuando se cree que el mundo verdadero es el material, si en cambio considera que el mundo verdadero es el Superior se habrá iniciado el proceso de la muerte mística.

4. El héroe continúa cruzando el umbral y se da cuenta que el mundo verdadero es el celeste.
En este caso el cochero comenzará el proceso de cederle el control al Amo del carruaje. Sabe que esto implicará dejar de ser el Amo, para convertirse en siervo de algo superior. Sabrá que el mundo verde es de ilusión. Una vez cedido el control al Amo se habrá producido la muerte mística.

QUE "NO ES LA MUERTE MISTICA"
La muerte mística no se logra simplemente cruzando el umbral, o realizando rituales.
Algunas personas que han realizado algunos cruces del umbral, han creído, equivocadamente, que esto implicaba "la muerte mística". Creían y creen que esto es suficiente para la transformación del Ser. Confunden así uno de los pasos necesarios para iniciar la trasformación, con la transformación misma.
Otros realizan infinidad de rituales, creyendo que es suficiente para producir los cambios. Confunden así las formas (los rituales) con el contenido (el cambio interno).

CONSECUENCIAS PRINCIPALES DE LA MUERTE MISTICA.
Las principales son:
1. Renacimiento.
2. Establecer su centro espiritual.
3. Recuperar el sentido de la eternidad.
4. Modificación de la línea decisoria-ejecutora.

1. Renacimiento.
"Jesús le contestó:
- Pues sí, te aseguro que si uno no nace de nuevo no podrá gozar del reinado de Dios. (Juan 3, 3).
"Él les contestó:
- Ha llegado la hora de que se manifieste la gloria de este Hombre. Sí, os lo aseguro, si el grano de trigo cae en tierra y no muere, queda infecundo; en cambio si muere, da fruto abundante." (Juan12, 23 y 24).

Al aceptar los cocheros la existencia de algo superior a ellos, se convierten en Hijos de Dios, un hijo que obedece sólo a la voluntad del Padre. Morirá como hijo común, de padre terrenal, y renacerá como hijo del Padre que está en el cielo
Por esto aceptan los cocheros morir como amos, pueden renacer como siervos de lo superior. De este modo los cocheros dejarán de creer que son los dueños del destino del conjunto-carruaje y se someterán al mando del Amo.
Así, El Amo, nuestra naturaleza superior, puede dirigir la luz de Dios, a través de los cocheros (naturaleza del medio) para actuar, en el mundo inferior, utilizando la naturaleza inferior de los caballos.




. Establecer su centro espiritual.
A partir de la muerte mística, nuestro héroe, al asumir como eterno el triángulo superior y como efímero el inferior, se posicionará en el Vehículo Superior como su lugar natural, su hogar, su paraíso perdido. Establecerá ahí un centro espiritual. Desde ese lugar comenzará a actuar para manifestarse en el mundo verde. Percibirá que el vehículo inferior es sólo un instrumento secundario y subordinado, por cuyo órgano obra el Amo del Carruaje.

3. Recuperar el sentido de la eternidad.
A partir de esta muerte iniciática el hombre recupera el sentido de la eternidad, ya no está sujeto al tiempo físico. Se sabe un ser espiritual, eterno, y que, durante su estadía terrena, únicamente su triángulo inferior queda atrapado en la esfera temporal.
Por esto cada vez que se encuentre en su triángulo superior podrá contemplar los eventos desde la visión de la eternidad. Podrá tomar distancia de los eventos que suceden "allá abajo". Recuperará así su centro pues, a partir de ahora, tendrá otros criterios de valoración de la realidad y se irá produciendo la total transformación de su vida y de su ser.

4. Modificación de la línea decisoria-ejecutora.
Entendemos por línea decisoria-ejecutora, el proceso que se manifiesta en la persona y que se inicia con la toma de una decisión y que finaliza con la ejecución de dicha idea, logrando de este modo que la idea se convierta en "acto". Esta línea decisoria-ejecutora hace especial referencia a los cuerpos que intervienen y el orden en el cual operan para dicha ejecución.
Una línea decisoria-ejecutora, puede iniciarse ya sea como "decisión" originada en el vehículo superior, u originada en el vehículo inferior. En este último caso a su vez la decisión puede provenir en el nivel de los cocheros, de los caballos o de la carroza (Capítulo 4).




Como sabemos existen dos grandes visiones de cuál es el mundo verdadero y una intermedia.
En un extremo la visión del hombre Plomo, el hombre dormido que cree que el mundo verdadero es el terrestre, el verde.
En el otro extremo la visión del hombre que ha sufrido la muerte mística, y sabe que el mundo verdadero es el celeste.
Y en algún lugar intermedio, de acuerdo al avance que haya realizado hasta el momento, la visión del hombre Despierto, que ya no acepta el mundo verde y que busca descubrir al verdadero.
Analizaremos ahora los efectos que produce en la aplicación de la línea decisoria-ejecutiva cada una de las dos visiones extremas de mundo, sabiendo que en el hombre despierto, dicha línea todavía tiene componentes de ambas.

4. a) LINEA DECISORIA-EJECUTIVA DEL HOMBRE PLOMO.
En este caso la persona actúa en función a la vida que se le presenta en el mundo verde, de este modo puede quedar afectado por las influencias terrenales que percibe a través de los sentidos.
Estas influencias pueden provenir de diversas esferas como ser la económica, la social, o la política. Será fácilmente influenciado por la información proveniente de los grandes medios de comunicación. Como consecuencia de esta relación de dependencia, reaccionará muchas veces de un modo automático, y predecible: ante determinados estímulos tales acciones.
Sus decisiones serán tomadas y ejecutadas desde su triángulo inferior. Operará preferentemente desde alguno de sus centros inferiores, en cualquiera de sus niveles y de acuerdo al centro que sea estimulado, ya sea la carroza, los caballos o el cochero tendrá una respuesta determinada.
Por esto la línea decisoria-ejecutora, nacerá en alguno de los siguientes cuerpos:
· Cocheros
· Caballos
· Carroza
Y luego ejecutada con intervención de los restantes cuerpos.
Así podría surgir una decisión tomada por los cocheros, que guiarán a los caballos para llevar el carruaje hacia algún lugar. En otros casos podrían ser los caballos, que con sus fuertes deseos, se impondrán a los cocheros logrando sus objetivos. También podría darse cualquiera de las otras combinaciones posibles entre estos tres elementos. En casos extremos la línea decisoria-ejecutora cambia varias veces durante el mismo día de acuerdo a los estímulos externos, llevando al conjunto carruaje al agotamiento.
Esta persona podrá ascender hacía el Vehículo superior para ingresar al mundo Celeste, pero de este mundo superior no provendrán las decisiones que definirán su vida. Él regresará siempre al mundo que considera verdadero: el mundo verde.

4. b) LINEA DECISORIA-EJECUTIVA DEL HOMBRE LUEGO DE LA MUERTE MISTICA.




En este caso la persona actúa en función a las decisiones superiores provenientes del triángulo superior (Capítulo 6). Estas son ejecutadas en su triángulo inferior a través del Cochero, que con mano firme dirigirá a los caballos llevando el carruaje hacia su destino. De este modo el Amo interviene en el mundo inferior, modificándolo.

La línea decisoria-ejecutora será:
2. Amo
3. Cochero
4. Caballos
5. Carruaje

Es el proceso que nace en lo alto para actuar en lo bajo. Esta voluntad superior, se materializa en el Amo y baja al triángulo inferior, a través del Cochero (lo mental), los Caballos (lo emocional y lo energético), y el Carruaje (lo físico), y se integra a la vida. Es el Amo que le da órdenes al cochero y éste las cumple con placer.




¿LA VIDA SE IMPONE?
Cuando la persona cree que el mundo verdadero es el verde, en el proceso decisorio-ejecutorio, la VIDA se impone a la persona. Cuando la persona sabe que el mundo verdadero es el Celeste, es la persona, el Alquimista, que se impone a la vida.

DIFERENCIA ENTRE EL DESPERTAR Y LA MUERTE MISTICA
Vimos que con el despertar, el hombre plomo se convierte en aspirante alquímico. La característica de este despertar es percibir con ojos nuevos el mundo que lo rodea.
En este sentido el despertar y la muerte mística tienen su parecido: producen una diferente percepción de la realidad anterior. Otro parecido es que ambas son etapas necesarias de la transmutación alquímica. Pero las diferencias son sustanciales.
El hombre despierto si bien ya no desea el mundo material, y desea algo superior, todavía no conoce el otro mundo. Podría incluso no llegar a conocerlo y volver a dormirse.
En cambio la muerte mística, como hemos visto, produce un cambio total en la visión de hombre, de mundo y de lo superior, y del modo de actuar en consecuencia. Este hombre no puede volver atrás, ha muerto a su vida anterior.

DIFERENCIA ENTRE LA MUERTE MISTICA Y LA MUERTE FISICA
Desde antiguo se han resaltado las similitudes entre la muerte física y la muerte mística.
Se afirma que el iniciado en los misterios puede visitar los mismos planos en los cuales se trasladan las almas de los muertos. El iniciado puede viajar por los siete niveles del cielo, sin necesidad de morir. El hombre plomo en cambio recién hará el descubrimiento de estos niveles luego de su muerte.
Ambos, el iniciado y el muerto, cruzarán el umbral accediendo a la visión del mundo espiritual. La diferencia con la muerte física (Capítulo 4), es que en ésta se destruye el vehículo inferior. En la muerte iniciática volvemos diariamente al triangulo inferior para renovarlo, revitalizarlo, adaptarlo a la misión y utilizarlo como medio para ejecutarla.
Veremos en el próximo capítulo las distintas formas que desde la antigüedad se han usado para pasar por el umbral y que nos puede llevar a la Muerte mística.

Continúa leyendo el siguiente capítulo aquí.

Autor: Dr. Dino Ricardo Deon.