PROBLEMAS DE LOS CINCO ORGANOS Y AURICULOTERAPIA

Examinamos los problemas concernientes a la fisiología de los cinco órganos. Cada uno de los cinco sabores tiene un órgano de preferencia determinado: el ácido penetra en el hígado, el picante entra en el pulmón, el amargo penetra en el corazón, el salado se introduce en el riñón y el dulce penetra en el bazo. Tales son las direcciones que toman los sabores después de llegar al estómago. Cada órgano controla una estructura corporal: el corazón controla los vasos; el pulmón controla la piel; el hígado controla los tendones; el bazo controla los músculos y el riñón controla los huesos.
Los cinco tipos de lesiones son los siguientes: un exceso en la utilización de la vista lesiona el espíritu del corazón y desgasta la sangre; estar acostado mucho tiempo lesiona la energía; encontrarse sentado mucho tiempo facilita que la sangre se estanque en los músculos, de modo que los lesiona; estar de pie mucho tiempo lesiona los huesos y caminar en exceso lesiona los tendones. Estos son los cinco tipos de lesiones.
Las manifestaciones clínicas derivadas de un desequilibrio de los cinco órganos son las siguientes: un desequilibrio de la energía del corazón se manifiesta por eructo; un desequilibrio en la energía del pulmón se manifiesta por tos; un desequilibrio en la energía del hígado induce al paciente a hablar mucho; un desequilibrio en la energía del bazo se manifiesta por regurgitaciones ácidas; un desequilibrio en la energía del riñón se manifiesta por bostezo; un desequilibrio en la energía del estómago se manifiesta por náuseas, vómito e hipo; una alteración de la energía de los intestinos delgado y grueso se manifestará por diarrea; una alteración de la energía del calentador inferior producirá edema; la falta de fluidez de la energía de la vejiga se manifestará por retención urinaria; la falta de control produce incontinencia urinaria, y el desequilibrio de la energía de la vesícula biliar produce irritabilidad o fácil enojo.
Cada órgano rechaza algo: el corazón rechaza el calor; el pulmón al frío; el hígado al viento; el bazo a la humedad; el riñón a la sequedad.
Cada órgano produce una secreción: la secreción del corazón es el sudor; la del pulmón es el moco nasal; la del hígado son las lágrimas; la del bazo es la saliva; la del riñón es la saliva más espesa.
Lo prohibido en relación con los cinco sabores es lo siguiente: cuando hay una enfermedad por alteración energética no se deben consumir en exceso alimentos o medicamentos picantes; lo salado hace que la sangre se torne más espesa, de modo que en las enfermedades de la sangre no se deben consumir en exceso medicamentos o alimentos salados; lo amargo lesiona los huesos, de manera que en las enfermedades de los huesos no se deben consumir en exceso alimentos o medicamentos amargos; el sabor dulce obstruye la función del bazo y de los músculos, por lo cual en las enfermedades de los músculos no se deben consumir en exceso alimentos o medicamentos dulces; y el ácido tiene la capacidad para contraer los tendones, por lo cual en las enfermedades de los tendones no se deben consumir en exceso alimentos o medicamentos ácidos. Éstas son, pues, las prohibiciones de los cinco sabores.
¿Cómo podemos ayudar a estos problemas utilizando Auriculoterapia?.
Por supuesto, buscando para cada persona una fórmula individual, según sean los síntomas. Se localizan y se masajean especialmente los puntos reveladores y los puntos dolorosos. En segundo lugar, se masajean los puntos somatotópicos indicados en los mapas anatómo-topográficos.
La Auriculoterapia tiene numerosas aplicaciones en los estados de desequilibrio psicológico y físico, mental y emocional. Estimulando ciertos puntos en la oreja obtenemos un efecto local (sobre una víscera o un órgano) y acción general, que tiene un efecto generalizado sobre diversas partes o funciones del organismo.
Resulta interesante notar que esta correlación de acciones en cadena está en función de los datos de la medicina tradicional china, es decir, de la dialéctica Yin-Yang, de la ley de los Cinco Elementos, y de la Ley de los Cinco Elementos y de la Teoría de los Meridianos.



Autora: Tatiana Doroshenko.