INSTITUTO DEON

"En todo lugar hay amplias oportunidades de observar las leyes de la Creación, tanto en las montañas como en los valles o entre nuestros hermanos los hombres. Los primero, convirtamos la vida en una aventura apasionante, en la que no quepa el aburrimiento, y con el conocimiento así logrado veamos como armonizar nuestra mente con nuestra alma y con la gran Unidad de la Creación de Dios."
Edward Bach

Muchas veces al perder el rumbo en la vida, son tantas las cosas en nuestro interior que nos confunden, que no es posible dilucidar cuál es de todas ellas la que nos podría conducir a algún lado, que podría hacernos sentir la satisfacción de saber qué es lo que deseamos en ese momento para poder sentirnos mejor.
En algunos casos la persona siente que su voluntad merma ante la pérdida de objetivos, se siente caída y confusa, por lo cual toma una actitud marcadamente pasiva. En esos casos, Wild Oat es la flor que según decía el propio Bach, nos marca el camino a seguir. Porque son muchos los sentimientos que producen la confusión y demasiadas las cosas para comprender antes de poder tomar una decisión, y todo ello agravado por el sentimiento de impotencia de actuar. Wild Oat abre una brecha en la barrera que no permite ver más allá y comienza a mostrar cuál o cuáles son los sentimientos internos más perturbadores, causantes de la pasividad en la que la persona se encuentra inmersa. Es como si del fondo del ser surgiera de pronto la claridad para permitir ver el tema que confunde y poder identificarlo como prioritario.
En mis entrevistas de florales, suelo dar esta flor a quienes, llevados por la insatisfacción de lo que están viviendo, no encuentran un camino en su realidad diaria, y aparentemente son muchos los temas que habría que resolver para ayudarlos a "correr el velo" y descubrir lo que quieren en verdad para que abandonen esa actitud pasiva. Wild Oat administrada sola, en esos casos hace que el tema responsable del bloqueo aflore a la superficie, y sea mucho más fácil de limipiar. Después de unos días, muchas veces recibo un llamado del consultante diciendo "ya descubrí qué me pasa" o "creo que ya sé lo que estoy buscando". De ahí en más el tratamiento se torna mucho más fácil.
Sin embargo, hay personas que sufren de la misma confusión interna en cuanto al camino a seguir, y si bien pueden no sentir que no pertenecen a ningún lugar, suelen ser muy activos al punto de tapar su insatisfacción con la hiperactividad. En estos casos, en la que nos enfrentamos a personas de personalidad opuesta pero cuyo problema es el mismo, la flor indicada es Holly, que también actuará como catalizadora para permitir que el tema bloqueante surja a la superficie. Holly abre nuestros centros de energía, en especial el centro cardíaco, relacionado con el dar. Al abrirse, la persona es capaz de comprender aquello que le sucede, descubriendo qué se esconde detrás de su hiperactividad. Es habitual que una persona de tipo Holly, al conocer las flores y sus efectos correspondientes, exclame ¡Pero yo necesito las 38! Luego de tomar Holly, sin duda aparecerán en la superficie aquellas que más necesita.
Por eso tanto Holly como Wild Oat son flores catalizadoras. En ambos casos, en especial cuando se las administra solas, ante la confusión del consultante, su acción permite jerarquizar los temas y obviamente aclarar las florales necesarias en cada caso.
Bach decía que Wild Oat es la flor que orienta, define y marca un camino a seguir y Holly es la flor del amor. ¿Qué mejor que sentir desde el fondo de nuestro corazón qué es lo que deseamos hacer con nuestra vida?

Autores: Staff de la Revista Crecimiento Interior.

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