PIEDRAS NEGRAS y
PROTECCIÓN ENERGÉTICA

Si bien el Color negro se asocia muchas veces con lo negativo, e incluso a veces con lo maléfico, también tiene que ver con el poder y en Gemoterapia las Piedras Negras ocupan un lugar muy especial.
En el caso de los Cristales negros, este Color encierra cantidad de cualidades positivas. Los Cristales considerados negros, si bien no son asociados con ningún Chakra directamente, suelen usarse para estimular el Primero o Ckakra base. Pero la propiedad terapéutica en común que tienen las Piedras Negras en Gemoterapia, es la de ser excelentes protectoras y transmutadoras energéticas.
No obstante cada uno de estos Cristales posee propiedades independientes, que ayudan a estimular determinadas zonas del cuerpo.
Analicemos entonces a algunos de ellos:

TURMALINA NEGRA:
Posee propiedades eléctricas que la transforman en el mejor escudo de defensa contra las energías negativas, imponiendo respeto y dando fuerza a las personas para superar las provocaciones y obstáculos.
Muchas veces, esas mismas energías negativas, son emitidas por la propia persona hacia sí misma, de modo que puede utilizarse una Turmalina negra durante la meditación para favorecer la superación de circunstancias adversas o confusas, alentando cambios hacia niveles de conciencia más enriquecedores, expandiendo la consciencia y permitiendo la evolución interior.

Las meditaciones pueden efectuarse sosteniendo la Turmalina negra entre las manos frente al Plexo Solar, al Corazón o la Frente, según el objetivo deseado, durante un minuto.
Según el centro energético elegido, se podrá visualizar que la vibración transforma la capacidad de juzgar (Plexo), aumentar la intuición (Corazón), o alinea los cuerpos físico, mental y emocional (Frente).

Es importante saber que su acción no es inmediata; el tiempo es su instrumento de trabajo (es gracias a él que podemos madurar y disolver las ilusiones). Pero al mismo tiempo es la piedra para quienes buscan la verdad.

La función más conocida de la Turmalina negra es la de neutralizadora de energías ambientales, por lo cual se la coloca frecuentemente en los lugares donde uno más suele habitar. Esa misma propiedad, la hace de gran utilidad en depresiones y neurosis, dado que, como he explicado en la forma de realizar la meditación, la Turmalina posee la capacidad de alinear los cuerpos físico, mental y espiritual.
Desde lo físico actúa sobre piel, huesos, ligamentos, cartílagos, y articulaciones. Ayuda a combatir los problemas de tendones y las congestiones dérmicas. También se aconseja para el embarazo, pues posee la propiedad de fortalecer el embrión.
Combinada con el Cristal de Cuarzo, se la utiliza en los desequilibrios de energías Yin y Yang.
Se la asocia a Saturno, el tercer aspecto de la fuerza de Dios, o Shiva, en la mitología hindú, en su aspecto destructor de las ilusiones de la materia y del ego. A su vez, la Turmalina negra devuelve la capacidad de ver la realidad y la verdadera cara de las personas.

OBSIDIANA NEGRA:
Esta piedra encierra el poder de hacer que las cosas aparezcan, de revelar ideas, es decir, provocar que aquello que se encuentra escondido o dormido en el inconsciente salga a la luz. Por ello se la considera también la diosa de los tesoros escondidos. En nuestra mente, muchas cualidades se encuentran en la oscuridad, a la espera de poder manifestarse.

La Obsidiana libera los sentimientos, de modo que puedan ser transmutados en otras formas, a través de expresiones creativas.
Se asocia a la vida después de la muerte, donde se purifican todas las imperfecciones del Alma para que esta pueda conocer la alegría de la luz celestial. El crecimiento espiritual y por ende, el material, son estimulados por la Obsidiana negra.

Dado que se la relaciona con las fuerzas creativas y de regeneración, se la relaciona con el Primer Chakra, si bien son las gemas rojas las que pertenecen a este centro de energía Base.
La Obsidiana actúa sobre el aparato reproductor y al mismo tiempo ejerce gran influencia sobre los meridianos que corresponden a este Chakra: el Intestino grueso (Ig) y el Intestino delgado (Id), ambos meridianos Yang. En ambos, se utiliza para sedar y así corregir los síntomas más comunes provocados por exceso de energía, es decir la sequedad de labios, ruidos en el tubo digestivo o presión en el vientre (Ig), y dolores en las orejas, zumbido en los oídos, o dolor de un solo lado de la cabeza (Id).

CUARZO AHUMADO O FUME:
Si bien no es totalmente negro, este tipo de Cuarzo se clasifica dentro de la categoría de piedras negras. Es la más antigua de las gemas, surgida con la aparición del mundo.

Esta piedra encierra dentro de sí toda la sabiduría ancestral. Representa la disipación de la ignorancia espiritual, mostrándonos que la oscuridad no es tan densa como parece ser, sino que siempre hay una salida.

Al igual que las anteriores gemas, el Cuarzo ahumado corresponde al Primer chakra. Sin embargo es la única que conecta los conflictos inherentes, (relacionados al área material) con la salida espiritual.
Es por esta razón que se la utiliza muy frecuentemente en las meditaciones, cuando se presentan este tipo de trabas: si nos dejamos llevar por ella durante algunos minutos, comprobaremos que tiene la capacidad de guiarnos, orientarnos y conducirnos finalmente por el camino correcto.

Su forma varía desde las delgadas puntas a las más hermosas druzas, pero también se lo encuentra en forma de piedra en bruto.

Es muy aconsejable tener un Cuarzo ahumado como ayudante en lugares donde el medio de trabajo es lo material, en especial el dinero o los grandes negocios.

En suma, los cristales negros no emiten ninguna energía negativa, más bien la absorben en algunos casos y en otros la transforman. ¡Incorpora entonces estos bellos Cristales a tu vida!.



Espero que hayas disfrutado de este material de lectura. Si te interesa aprender sobre Gemoterapia y el uso terapéutico de los Cristales, te invitamos a conocer nuestro curso a distancia haciendo un click aquí.