AROMATERAPIA
Aceites esenciales indicados para diferentes trastornos
(de la a a la d)

A lo largo de todos estos años, hemos conversado sobre las propiedades terapéuticas de cada uno de los Aceites Esenciales.
En este artículo, invertiré la forma y en vez de describir las propiedades de un Aceite en especial, y explicar el trastorno o enfermedad sobre el cual es efectivo, te presentaré una lista de dichos problemas y colocaré a continuación los Aceites Esenciales más comunes, recomendados en cada caso.
Entre paréntesis te aconsejo algunos medios a través de los cuales podemos abordarlos. En mi canal de YouTube Marina Deon encontrarás recetas paso a paso para preparar productos cosméticos, perfumes spray de ambientes ¡y muchos productos más!, que seguramente te serán de ayuda para elaborar estas fórmulas.
Te recuerdo que no es necesario utilizar todos los aceites esenciales juntos, sino simplemente algunos o aquellos que prefieras (puede ser incluso uno solo).

Acné (en productos cosméticos y de higiene diaria): menta, rosa, salvia, limón, árbol de té (tea tree), bergamota, cedro, hierba limonera (lemongrass), vetiver, mandarina, lavanda (espliego), enebro o sándalo.

Alergias (en hornillos o humidicadores): romero, melisa (toronjil), salvia.

Angustia (en hornillos, humidificadores, masajes o perfumes): lavanda (espliego), melisa (toronjil), salvia, azahar, palmarosa o rosa.

Ansiedad (en hornillos, humidificadores, masajes o perfumes): bergamota, jazmín, melisa (toronjil), azahar, patchouli (pachuli), lavanda (espliego) o rosa.

Arrugas (en productos cosméticos): limón, azahar, petir grain, palmarrosa, rosa, sándalo, incienso o geranio.

Asma (en hornillos o humidificadores): tomillo, romero, eucaliptus, árbol de té (tea tree), espliego (lavanda), melisa (toronjil), menta, salvia o pino.

Baja autoestima (en hornillos, humidificadores, masajes o perfumes): jazmín, ylang ylang, rosa, romero, patchouli o tomillo.

Bronquitis (en hornillos, humidificadores, baños o masajes): tomillo, eucaliptus, árbol de té (tea tree), cedro, menta o pino.

Cabello caída (en shampoos y acondicionadores): romero, cedro, enebro o lavanda (espliego).

Cabellos grasos (en shampoo y acondicionadores): árbol de té (tea tree), limón o naranja.

Cabellos secos (en shampoo y acondicionadores): sándalo, ylang ylang, lavanda (espliego), rosa o azahar.

Calambres (en masajes): espliego (lavanda), melisa (toronjil), salvia o enebro.

Caspa (en shampoo): árbol de té (tea tree), cedro, romero o limón.

Celulitis (en masajes y productos cosméticos): enebro, limón, geranio, rosa, salvia o romero.

Cicatrices (en productos cosméticos): geranio, jazmín, lavanda (espliego), patchouli (pachuli), salvia o sándalo.

Depresión (en hornillos, humidificadores, perfumes, baños o masajes): bergamota, geranio, jazmín, lavanda (espliego), menta, azahar, palmarosa, patchouli (pachuli), rosa, sándalo, ylang ylang, limón o naranja.

Desconcentración (en hornillos y humidificadores): limón, menta, patchouli (pachuli), romero, árbol de té (tea tree), tomillo o eucaliptus.

Digestión lenta (en masajes abdominales vehiculizado en una crema o aceite vegetal): naranja o mandarina.

En el próximo artículo continuaremos con el listado en orden alfabético.

Ahora bien, como Aromaterapeutas debemos tratar de investigar las causas que han originado el trastorno a abordar.
Por ejemplo si nos encontramos con una persona que sufre de caída del cabello, quizás se deba a nerviosismo y por lo tanto agregaremos en la indicación un Aceite Esencial relajante.
De esta manera, no sólo estaríamos evitando que el cabello se siga debilitando, sino también que no vuelva a aparecer dicho trastorno.

Otro ejemplo lo encontraríamos en un caso de digestión lenta por un estado depresivo. Lo importante a tener en cuenta es que no sólo debemos abordar el caso por el cual la persona consulta, sino también las causas que lo originan, para evitar su repetición.

A su vez es importante que conozcamos a cada uno de estos problemas de salud, para poder realizar recomendaciones que ayudarán al proceso de curación y al trabajo preventivo.
Supongamos que nos encontramos frente a un caso de acné facial, entonces podremos recomendar mantener la piel limpia y libre de productos cosméticos grasosos; utilizar una loción astringente por la mañana y por la noche; evitar tocarse el rostro o presionar los granos, puesto que se puede provocar el contagio o dejar cicatrices; beber agua en abundancia; cuidar la dieta alimentaria, sobre todo evitar las grasas, el chocolate o las frituras.

Autora: Marina Deon, International Federation of Aromatherapists (IFA) Federación Internacional de Aromaterapeutas, Associate Member (Miembro Asociado) Nº 9633, Londres, Inglaterra y Spa Management.



Espero que hayas disfrutado de este material de lectura. Si te interesa aprender sobre Aromaterapia a un nivel profesional, te invitamos a conocer nuestra carrera a distancia Auxiliar en Aromaterapia.

Si vives en Argentina y necesitas comprar Aceites esenciales naturales, y de calidad cosmética y aromaterapéutica proresional, recibiéndolos cómodamente en tu domicilio, puedes hacerlo visitando nuestro E-shop aquí.