LAS ESTRELLAS: ARCANO XVII
Descripción y su simbolismo

Dicen que en los 22 arcanos mayores del Tarot está oculto todo el saber de la Biblioteca de Alejandría. Dicen que, a partir de estas cartas, es factible ir descubriendo de a poco el Gran Saber Universal. Dicen que en cada una de ellas está contenido un sector de esta sabiduría, y que en su conjunto forman un sistema cerrado que contiene todo el conocimiento. Cada carta agrupa entonces un ramillete de información, y que al utilizarla correctamente disparará en nosotros una forma de conocimiento revelador. Que al observar el arcano, éste se puede convertir en una especie de pantalla de televisión, que comenzará a emitir imágenes portadoras de un conocimiento necesario para el consultante.

¿De dónde proviene ese conocimiento?
Algunos afirman que proviene de nuestro interior. Otros dicen que proviene de lo "superior", de un lugar externo a nosotros. Que los naipes son simplemente un medio para generar esa conexión.
¿La carta que analizaremos nos invita a acceder al conocimiento?. Sí, pero no a cualquier conocimiento. Sabemos que existen diversos conocimientos, y que son accesibles por variados medios, pues existen muchas fuentes de donde beber. Sabemos de la existencia del conocimiento exotérico, ese que se encuentra disponible fácilmente para toda la sociedad. También sabemos del otro conocimiento, del oculto, del esotérico, sólo accesible aparentemente para los iniciados en los misterios. Pero de lo que trata este Arcano no proviene de ninguna de esas dos fuentes, proviene de otra parte. Como dijimos no se trata del conocimiento externo, aquel que se accede a través de los sentidos físicos. Así queda descartado al conocimiento exotérico, y la información que proviene de otros medios físicos tradicionales. Tampoco se trata de "razonar" información. Descartaremos entonces también a nuestra mente consciente. ¿Dónde buscarlo entonces?.
Un grupo afirma que se trata de una búsqueda en nuestro interior. Enseñan que en lo profundo de nuestra Psique se encuentra toda la información necesaria. Dentro de esta línea encontramos a Freud con el Inconsciente, y a Jung con el inconsciente colectivo y sus Arquetipos.
Otro grupo nos dirá que el saber que proviene del Estudio de la Carta natal (Astrología), nos indicará nuestro camino en la vida.
Para otros se trata de acceder a seres superiores, a Dioses, que desean comunicarse con nosotros. Ellos utilizarán medios como los oráculos, o los sueños para acceder a ellos.
Otros hablan de los Archivos Akásicos, una información colocada en algún lugar del "espacio" estelar, disponible para aquel que pueda sintonizar con dichos archivos.
En cualquiera de los casos se trata indudablemente de un medio de acceder a un conocimiento hasta ese momento oculto para nosotros. El Arcano "Las Estrellas" nos hará penetrar en ese mundo de saber. Esta carta, nos pide que busquemos ese saber. Nos está pidiendo que quitemos nuestro interés del mundo exterior, para centrarnos en nuestro mundo interior. Que busquemos dentro nuestro las respuestas, la fuerza. Que cerremos las puertas y ventanas que nos comunican con el exterior de nuestro ser.
Nos pide entonces que busquemos un "saber", pero... ¿saber para qué?.
Recordemos que la carta anterior, la número XVI, "La Torre", se refiere a una caída, originada en haber pretendido construir un edificio sin seguir los planos del gran constructor del universo, que a través de las estrellas nos indicaba el modo correcto de construcción.
La Carta de Las Estrellas nos expresa que ha llegado el momento de buscar acceder a estos Planos provenientes del cielo, como muchos sabios lo hicieron en la antigüedad.
Este conocimiento de los planos para hacer el edificio, nos recuerda el Templo de Jerusalén, construido por el Rey Salomón siguiendo expresamente los planos que habían recibido desde el Cielo. Dentro del Templo se encontraba el Arca de la Alianza, donde se guardaron las Tablas de la Ley. Las tablas que habían sido entregadas por Dios a Moisés. En estas Tablas estaban grabados los Diez Mandamientos, como guía de vida proveniente del cielo para los humanos. Adelantemos que en esta Carta además del simbolismo de las estrellas indicando el eje que debe guiar nuestra búsqueda de significado, aparece la imagen del ramillete de Acacia; y que de madera de Acacia estaba construida el Arca de la Alianza guardada en el Templo.
Es asombroso cuánto conocimiento puede contener una "simple" imagen.

DESCRIPCIÓN Y SIMBOLISMO:
Veamos juntos los elementos de la imagen.
Primero: el nombre "Las estrellas". ¿Qué significan las estrellas?.
Desde la antigüedad el hombre ha mirado el cielo buscando comprenderlas. Les ha atribuido muchos significados. Los astrólogos afirman que de acuerdo a la posición de determinadas estrellas en el momento del nacimiento será el carácter, la personalidad, y el modo de vida de la persona.
Aún los más incrédulos, utilizan la posición de la Luna para saber el movimiento de las mareas.

Simbolismo:
Vamos a analizar ahora los elementos de la imagen.
- Una muchacha desnuda dulce y bella, de rodillas junto al agua.
- Ella vierte el contenido preciado de sus dos ánforas.
- El riego constante mantiene la vegetación.
- Un estanque y un terreno fértil.
- Un ramo de acacia.
- Una rosa abierta.
- Una mariposa.
- Ocho estrellas.

¿QUÉ REPRESENTA LA MUJER DESNUDA?
Se ha interpretado de diversos modos, han podido ver en esta joven desnuda a:
- Una virgen, y en este caso se refiere a una mujer inmaculada, que busca tomar el conocimiento de lo superior, contenido en las estrellas, para verterlo, sin contaminarlo, en la tierra.
- A Venus, que representa el amor, la belleza en la mejor de sus formas, y por lo tanto al sentimiento estético.
- A Sofía, y con ello a la sabiduría.
- A la Diosa Hathor, que nutre todo lo creado.
- La mujer consoladora que reanima al hombre agobiado por las luchas de la existencia.
- Eva a quien se le anuncia el Redentor.

¿Por qué desnuda?
Su desnudez índica pureza. La desnudez como entrega a lo superior, y recupero de la naturalidad más allá de la cultura. La joven desnuda alude a la inocencia. Como decíamos más arriba, esta desnudez hace referencia a lo inmaculado.

¿Por qué de rodillas?
Además, de lo obvio, pues es una posición cómoda para la tarea, implica un acercamiento a aquello que nutre. Un acercamiento a La Naturaleza. No lo hace desde la distancia de aquel que está parado, erguido; sino que implica una posición de integración con lo inferior, lo terreno. Una posición que le permitirá, utilizando el conocimiento y la energía de las estrellas, hacer de nexo con lo terrenal que debe nutrir con los líquidos de las ánforas.

LAS ANFORAS. ¿Qué vierten?.
Una ánfora es de Oro: que contiene un líquido ardiente, inagotable, vivificador del agua estancada. Esta ánfora sostenida con la mano derecha implica la fuerza de lo que los chinos denominan Yang. De este modo esta energía positiva nutrirá el agua del estanque. Esta energía solar, masculina, entrará en las aguas. Recordemos que las aguas son también el reino del inconsciente, de lo oculto. Por lo tanto nos invita a entrar en lo más profundo de nosotros. Con la energía y las indicaciones provenientes de las estrellas, entraremos en nuestro interior en búsqueda de "nuestra verdad", de "nuestro conocimiento".
La otra ánfora de plata, sostenida con la mano izquierda, vierte sobre la tierra árida un agua fresca y fertilizante, inagotable. Esta mano representa la energía Yin, pasiva, lunar. Y así aquí nos indica que a lo sólido y terrenal representado por la tierra, es necesario nutrirlo con la energía complementaria, la lunar.
La imagen en conjunto muestra cómo la muchacha hace de nexo entre lo superior a nosotros y lo inferior, lo terreno. Las ánforas son las que crean la circulación de las energías superiores hacia el reino inferior. Traen con ellas los "códigos" que permitirán dar indicaciones precisas de cómo crear las formas en lo material. Sabemos que en la Bellota está contenida toda la información para construir un poderoso Roble. ¿De dónde viene ese conocimiento, y con qué energía se nutre esa Bellota?. Esta carta nos puede ayudar a saberlo.
Las ánforas entonces proveen la savia de la vida universal, esa savia que implica la vida dada a las criaturas.

EL NEXO ENTRE DOS MUNDOS
La virgen a través de este acto se convierte en el alma que une lo espiritual con lo material, que nutre a todo lo creado. Mostrando el accionar del ciclo de la Naturaleza, el ciclo de la inmortalidad del universo que se manifiesta a través de la mortalidad de sus criaturas, que a nivel individual parecen nacer y morir, pero que a nivel de especie están siempre presentes a través del germen de su reproducción de ser en ser.
La virgen, como humano, está realizando el nexo. Vivimos en un plano de dualidad, en el plano terreno, el plano de los opuestos, de las contradicciones, del Yin y el Yang.
Sobre nosotros, sobre nuestras cabezas, hay un orden superior, permanente, un orden que muestra la coincidencia de los Opuestos. Ese orden superior de las estrellas queda oculto durante el día, durante la jornada de febril actividad, por la fulgurante luz del Sol que nos invita al trabajo diario. De este modo miramos hacia abajo para hacer nuestra tarea sobre el planeta. Pero las estrellas están ahí enviando permanentemente su energía, ¿o no lo vemos diariamente a través del influjo de la luna sobre las aguas?. Y no me refiero solamente a las mareas que podemos ver en las costas del mar, sino a las mareas que existen en el interior de nuestro cuerpo físico, compuesto por cerca de un setenta por ciento de agua, y sujeto por lo tanto a esta influencia.
En este mundo de los opuestos, cuando el Sol "desaparece" del horizonte, llega el momento de la calma, de la oscuridad que invita al descanso, al sueño, al reposo reparador.
Y en ese momento en donde parecería que nos retiramos del mundo hasta el día siguiente, en realidad nos retiramos de un mundo externo o solar, para ingresar a uno más rico en significados: el mundo interno o lunar.
Ese es el reino de los sueños.
Pero este tema será motivo de la segunda parte de la nota sobre este importante arcano, la cual será publicada el mes próximo.


Autor: Dr. Dino Ricardo Deon.