LA DESTRUCCION DE LOS COLOSOS DEL IMPERIO

New York, ciudad sede de la economía mundial. En su microcentro se concentra la mayoría de las actividades relacionadas con el poder a través del dinero. Es allí, en su seno en donde se da el ataque... Es el blanco por excelencia...
Las gemelas, conformaban la representación espacial del equilibrio ying y yang en cuanto a lo económico, siendo de alguna forma la manifestación arquitectónica de un sistema que estaba en equilibrio.
Las formas masculina y femenina de las torres respondían a una estructura capitalista de la que deberíamos salir.
El golpe atestado a estos amantes verticales que se miraban casi por eternum hasta esta semana, hace pensar que el supuesto equilibrio del sistema norteamericano económico realmente trastabilla.
Asimismo, la tecnología va envolviendo a los seres humanos de tal forma que nos vemos comprometidos en la utilización de materiales no aptos para el desarrollo perfecto de la vida. También las formas tienen mucho que ver en esto, ya que se optó por edificios de 110 pisos con mayores gastos de mantenimiento y peligrosidad en cuanto a la evacuación en caso de incendios o problemas inmanejables. Esa vieja película "Infierno en la torre" parece haberse debilitado ante la realidad que nos conmueve en estos días.
Dentro del Feng Shui las torres pertenecen al elemento madera, por su forma prismática. La madera tiende a crecer... es la forma buscada para apoyar un sistema económico al que se desea desarrollar cada vez más. La madera destruida por el fuego...
Lo mencionado no es atributo sólo de las gemelas de New York. Aquí mismo, en Capital Federal, la zona de Catalinas es el calco del imperio. La ideología que las construyó es la misma que implantó a sus hermanas norteamericanas, como así también las formas y la tecnología utilizadas son el calco.
En todas las grandes ciudades del mundo sucede esto de concentrar el poder en áreas del centro, apoyándose mutuamente para desarrollar más poder económico entre todas las torres juntas ( únete y seremos más fuertes). En París, luego del Arc de la Defense, aparece una nueva ciudad que pierde las características edilicias de la ciudad para convertirse en una concentración de torres acristaladas en la periferia de París.
Además los cristales del aventanamiento de las torres duplican el poderío de éstas.
A los pies de las torres...

No tenemos en cuenta que es lo que sucede en el suelo en donde se concentra este amontonamiento arquitectónico, que funciona como verdaderas agujas de apucuntura o, mejor dicho geopuntura, utilizando esta técnica sin saber cómo. Se daña la corteza terrestre apoyando cargas concentradas sin saber qué es lo que pasa en ella más de lo que señalan los estudios de suelo pertinentes. Es que no se piensa que la Tierra tiene vida?. Por ella pasan canales de energía vital, como sucede en nuestro cuerpo a través de los nadis. La mayoría de los arquitectos no tienen en cuenta este aspecto cuando diseñan tremendas torres.
Esto de apiñarse en las ciudades también tiene que ver con la usura desmedida de la actividad inmobiliaria, el hecho de vender más cantidad de inmuebles a mayor precio.

La humanidad, como un niño pequeño, necesita de las situaciones límites para cambiar, necesitamos del dolor para producir cambios... Lo contrario que se pregona a través del Feng Shui, técnica que propone el bienestar de las personas a través de la armonización de los espacios habitables.


Autora: Arq. Cristina Curubetto.